Todo comenzó a los 12 años, cuando Ruben Ordóñez “cocinó” su primer calaverita literaria, un ejercicio que no ha dejado de practicar; hoy a sus 85 años de edad, la jocosidad le permite seguir creando rimas que roban sonrisas.
“La jocosidad es igual a risas y eso se traduce en alegría, y esa ha sido la medicina para tener una buena salud a mis 85”, señaló don Ordóñez oriundo de Zacatecas, pero ya radicado en Toluca desde hace más de 40 años.
Su amor por las calaveritas literarias, lo ha hecho ejercitarse constantemente y por lo mismo, no ha dejado de elaborar esas rimas con el único objetivo de hacer pasar un momento agradable a sus lectores.
Vecino de San Mateo Oxtotitlán, don Ordóñez compartió que la materia prima para sus calaveritas nunca se va a extinguir, pues siempre hay de qué hablar en temas políticos, sociales, deportivos, entre otros.
A la edad de 12 años, ya trabajando para un periódico de Zacatecas comenzó su romance con las rimas y a los 15 años redactó su primer calaverita literaria que dedicó a un afamado licenciado y que dice:
La muerte desde un estrado,
Instalado en un madero,
Le gritaba al licenciado,
Sal bigotes de aguacero.
Don Nicho se sorprendió,
Al escuchar las ofensas,
Más pronto le respondió,
No son bigotes, son trenzas.
💀👨⚖️👨🦰
Posteriormente, su vida dio un giro inesperado,
pues una invitación de un ingeniero de la CFE, lo hicieron viajar a la Ciudad
de México a trabajar y escogió a Toluca, como su casa. Pese a su labor nunca dejó la jocosidad y la broma, de tal suerte que
siguió escribiendo calaveritas y hasta la fecha cada Día de Muertos realiza sus
creaciones literarias, aquí otra muestra:
Al deportivo Toluca
Al no ganar en su casa,
Y la afición irritada, exclama
Valentín, qué pasa?
Esto esta de la patada
⚽🦵🏵️
Otra de las creaciones literarias de las que recuerda en su época de la adolescencia, fue una calaverita que escribió a un reconocido periodista de Fresnillo, la cual enunció:
Presumió de periodista,
y escritor como Leon Trotsky,
y mejor comentarista,
Que Jacobo Zabludovsky
🎙️👴⚰️
Actualmente continua de manera interrumpida no sólo calaveritas literarias, sino algunas historias jocosas.
Su vida, finalizó, siempre han sido los chistes y bromas, y eso lo ha llevado a perfeccionar sus creaciones literarias que hacía desde pequeño.
“La jocosidad que tiene como resultado natural la risa y la alegría, me ha hecho ganar muchos amigos y ser un buen padre, esposo y vecino, por no decir hasta bufón.
Finalmente escribió una calaverita literaria a los presidentes municipales a propósito de su termino de gobierno:
El trabajo no fue el balde,
Pues siempre nos llevamos algo,
Manifestó cada alcalde,
En este año de Hidalgo.
🧑⚖️☠️